De las herramientas más importantes para mecánica y que seguramente son el día a día para la mayoría de trabajadores en un taller de esta índole son, sin duda alguna, los gatos hidráulicos, ya que, gracias a ellos, los trabajadores pueden desempeñar sus actividades de una forma mucho más sencilla.
TIPOS DE GATO HIDRÁULICO
Los dos tipos de gatos hidráulicos que se utilizan con una mayor frecuencia son el gato de patín y el de botella, siendo este último el más adecuado para levantar cargas pesadas de forma vertical, mientras que el de patín o carretilla tiene un perfil bajo y es ideal para levantar vehículos de altura baja.
Es importante saber lo que tengas presente antes de utilizar esta herramienta que se debe colocar en un punto fijo del automóvil u objeto a levantar, pues de lo contrario, el mismo peso podría llegar a afectar su funcionamiento lo que podría significar un accidente.
¿CÓMO SE UTILIZA?
Después de mencionar lo anterior, hay ciertos puntos que deben quedar bastante claros antes de poner en acción un gato hidráulico:
- Lo principal es encontrar una superficie plana y firme para colocar el gato debajo de ella, lo que evitará que se mueva posteriormente o pueda llegar a resbalarse.
- Utiliza la palanca para elevarla hasta que toque con el objeto.
- Al momento de sentir que el objeto ya está sobre la cabeza del gato es importante continuar con el levantamiento lentamente y con un ritmo uniforme.
- También puedes apoyarte de torres a manera de precaución, para reducir riesgos.
- Y finalmente, al terminar tu trabajo, tendrás que bajar el objeto o vehículo lentamente.
¿CUÁL ES EL IDEAL PARA MÍ?
Partiendo de los puntos anteriores donde mencionamos el funcionamiento de los diferentes gatos hidráulicos, podemos recomendar que siempre adquieras uno después de verificar el peso del objeto a levantar, es decir, si tu vehículo tiene un peso superior a las dos toneladas, será mejor que el gato pueda soportarlo en su totalidad, esto no quiere decir que lo vayas a levantar en su totalidad, pero sí puede ser un buen parteaguas para adquirir el indicado.
Un coche promedio en México pesa aproximadamente 1.2 toneladas, por lo que un gato de patín de 1.5 toneladas, podría funcionarte a la perfección.
Por otra parte, si lo que vamos a levantar es una camioneta pequeña, te recomendamos hacerlo con un gato de patín que pueda soportar de 2 a 3 toneladas, mientras que para una camioneta de carga será mejor utilizar uno profesional con capacidad de carga de hasta 3.5 toneladas.
Siempre recordando que para una carga superior a este peso será necesario contar con un Gato de Botella mismo que podrás encontrar dentro de la línea Truper con una capacidad de hasta 50 toneladas.